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Alicia de Larrocha 

Directora de la Integral

Ha sido una pianista catalana, considerada una de las mejores de su generación. Nacida en 1923 en la ciudad de Barcelona, comenzó sus estudios musicales a los tres años, ofreciendo su primer concierto a los seis y participando a los once, por primera vez, en un concierto oficial con la Orquesta Sinfónica de Madrid. A partir de 1939 comenzó a ofrecer conciertos con diferentes orquestas europeas y acompañando a intérpretes de primer nivel.

Larrocha fue discípula del pedagogo y pianista Frank Marshall, continuador de la prestigiosa Academia Granados-Marshall fundada por Enric Granados. En el centro, del que acabó asumiendo la dirección, conoció a los prestigiosos pianistas Anton Rubinstein, Emil von Sauer o Alfred Cortot. A partir de 1954, año en que debutó en los Estados Unidos de América, empezó a impulsar su reconocimiento internacional por su impecable técnica pianística. Su carrera se aceleró a partir de la década de los sesenta, hasta llegar a programar unos 120 conciertos anuales en todo el mundo, ya fuera sola o acompañada de orquesta, además de realizar de tres giras anuales por diferentes ciudades de Estados Unidos.

Entre la gran cantidad de premios que recibió destacan el Premio Unesco (1995), dos premios Ondas (1992 y 2000), el Premio Ciutat de Barcelona, la Medalla d’Or de la Ciutat de Barcelona (1980), la Medalla d’Or de la Generalitat de Catalunya (1983), cuatro Premios Grammy (1974 por Albéniz: Iberia, 1975, 1988, 1991), tres Premios Edison (1968, 1978, 1989), dos Grand Prix du Disque (1960, 1974), dos Record of the Year de Londres (1971, 1974), un premio Deutsche Schallplattenpreis (1979), Premio Nacional de Música de la Generalitat de Catalunya (2004) y el premio Franz Liszt de Budapest (1980). También fue investida Doctora Honoris Causa de varios centros de enseñanza superior en los Estados Unidos y en Cataluña.

Casada con el también pianista Juan Torra y madre de dos hijos, se mantuvo activa hasta una avanzada edad, ya que emprendió una gira en el año 2000 por países de Sudamérica. También ofreció un recital en Miami en 2001 y participó en varias actuaciones en 2002, en lugares tan emblemáticos como el Palau de la Música Catalana de Barcelona y la sala Carnegie Hall de Nueva York. Murió el 25 de septiembre de 2009 en la Clínica Quirón de Barcelona, a los ochenta y seis años. Como personalidad relevante por haber recibido la máxima distinción del país, el domingo 27, de diez de la mañana a seis de la tarde, se instaló la capilla ardiente en el Saló de Sant Jordi del Palau de la Generalitat de Catalunya para quien quisiera despedirse de la insigne concertista.